domingo, 4 de enero de 2015

Berlín

¡Bueeeeenos días! ¿Qué tal todo? Espero que no muy hartos de comer ni de fiestas, que ya solo queda Reyes y se dan por finalizadas hasta el año que viene jajajaja. Espero que hayáis entrado en el 2015 con muy buen pie y, sino, a cambiarle que nunca es tarde. El caso es que hoy os voy  a contar por qué estos últimos días no he escrito nada: estuve en Berlín. Sísí. Nos fuimos para desconectar de las Navidades, que sino se hacen largas, y no veáis si se nota. La cosa es que a lo tonto y a lo bobo creo que ha sido uno de los mejores viajes que he hecho. ¿Os acordáis de cuando os conté en verano mi viaje a Inglaterra? (si no podéis recordarlo aquí y aquí) Bueno, pues he visto a algunos de los amigos que hice allí, y ha sido genial!
Aparte de hacer turismo y todo eso (hemos visto muchas cosas como el Bundestag ocomoseescriba, Postdamer Platz, Alexander Platz, la puerta de Brandemburgo, la Catedral, la Isla de los Museos y algunos de estos, el pasadizo del terror, trozos de lo que queda de muro, el zoo, iglesias... y un montón de mercadillos navideños que hay por allí ahora y que son preciosos) nos lo hemos pasado genial juntos. La única cosa mala es que casi todo el centro estaba de obras, pero bueno, así tenemos que volver jajajaja.

 
Bundestag (cúpula del Parlamento)
Puerta de Brandemburgo
Catedral 
Aquí podéis ver por dónde iba el muro, aunque lógicamente solo quedan algunos trozos. Algo que me impactó mucho es que, en uno de ellos (de los que vi yo), justo debajo del muro, por un lado; estaba a cielo abierto el crematorio de los judíos, y según me contaron allí todo el mundo lo veía todo...
Uno de los muchísimos mercadillos navideños que son preciosos. 
Otro sitio que visitamos fue el KaDeWe, que es como un Corte Inglés pero a lo bestia, literal. Es el gran almacén más grande de Europa (ni Harrods), y solo se encuentra en Berlín. Pero vamos, que a mi me pareció eso, que es igual que el Corte Inglés pero mucho más grande, porque al final las marcas y todo son siempre las mismas.
Aunque, si vais, deciros que os deis una vuelta por la zona de comida, que hay diferentes barras chiquitillas de cada tipo de comida, y puedes comer ahí perfectamente (si encuentras sitio, claro).

Lo bueno del viaje es que, aparte de haber visto a mis amigos que ha sido lo mejor, es que al ir con gente de allí que se lo ha tenido que estudiar me lo han explicado todo fenomenal (que iba rodeada de guías particulares, vamos).
La conclusión final es que me ha encantado. Ya había viajado a Alemania hace unos años pero no a Berlín, sino por toda la zona de Colonia, Bohn y por ahí, y no tiene nada que ver. No sé si habrá cambiado, pero toda esa zona es como más alemana (que no fea, oye, que a mi me encantaron y sobretodo Colonia), mientras que Berlín es más Cosmopólita y es como otra gran ciudad (lo que tiene la globalización, aunque no deja de tener su encanto).
Otra cosa que me ha sorprendido y lo digo como curiosidad es el metro. Aparte de estar muy limpio (es, junto con Madrid, el más limpio del mundo), es que bajas las escaleras de la estación y estás directamente en el andén. Las máquinas e los tickets están ahí mismo y lo tiene que comprar, y puede que te lo pidan o no (vamos, que era más tentador hacer un sinpa...). El caso es que se fían mucho de la gente, porque vamos, eso lo hacen aquí y pfff jajajaja.
El caso es que, como impresión general, os digo que a mí me ha encantado y, si tenéis la oportunidad, no dejéis de visitarla porque os va a gustar (seguro, toda la gente que lo conoce lo dice). Yo volvería sin ninguna duda (a ver si lo lee alguien cercano y me lleva ;) ;)
Nosotros nos leemos pronto, muaaacks,

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